Con estilo en Sunderland
Si bien Exeter ha sido como mi hogar durante los últimos años, jugando con las Chiefs (en la Premiership Women’s Rugby, la máxima competición de clubes de Inglaterra), nunca había estado tan al norte. Es precioso. Nuestro hotel es encantador. Desde la ventana se ven todos los puentes y el agua de la ciudad; es absolutamente precioso.
Cuando la selección estadounidense llegó a la ciudad en autobús, ya se puede sentir la energía que va en aumento. Había un montón de mujeres cantando, y nosotras nos unimos a ellas. ¡Diría qué bueno que somos jugadoras de rugby! Hagamos lo que hagamos, lo hacemos con mucho corazón y pasión.
Es genial ver cómo ha progresado la Rugby World Cup Femenina, siendo esta mi cuarta. Desde 2014 y 2017 hasta el último Mundial en 2021, hubo un salto enorme. Pero desde el último hasta éste, ha habido un progreso enorme.
Calendario de la semana de partidos
El lunes es nuestro día más duro. Lo llamamos "Día de Combate". Serán tres sesiones en total.
Me encanta el Día de Combate. Soy, ya sabes, pilar, y me gusta el físico... Muchos bloques de habilidades se centran en el contacto y luego siempre hacemos un mini-partido al final del entrenamiento, contacto total.
Ese es el grueso de nuestro trabajo duro. Luego tenemos un día de recuperación. Tratamientos, piscina, tiempo libre. Estar juntas tanto tiempo y en un Mundial, genera mucho estrés mental. Así que es un día en el que tenemos un poco más de autonomía para elegir lo que queremos hacer: si quieres ir a tomar un café, dar un paseo, tumbarte en la cama a ver la tele. Es como un día para recargar energías.
Hay expectativas sobre la recuperación. Hacemos puntos de recuperación y lo convertimos en una especie de competencia entre los muchos equipos internos que tenemos en la gira.
Luego pasamos a lo que llamamos un "día de velocidad", donde nos centramos en la velocidad y la ejecución. Para entonces, se espera que sepas exactamente lo que estás haciendo y seas capaz de ejecutarlo, para ganar confianza de cara al Captain’s Run (o visita al estadio, una sesión corta, sin contacto, en el campo de juego, el día antes del inicio del partido).
Cargando combustible
Estoy en mejor forma y más fuerte que en cualquier torneo de rugby, ni que hablar de una Rugby World Cup; aún así y mi preparador físico me dice: "Necesitas comer un poco más, sigues siendo una pilar".
Es una gran noticia. Significa puedo comer más. Es comer rico en proteínas, especialmente después del entrenamiento. Y luego, como atleta joven, a menudo puedes evitar los carbohidratos, porque hay opiniones contradictorias sobre ellos, pero son muy importantes para la recuperación y la alimentación. Obviamente, también comer verduras y, ya sabes, un capricho de vez en cuando, ¿no es terrible? Para mí, una galleta o un rollo de canela.
Preparación mental
Intento estar presente lo más posible y confiar en lo que sé que puedo hacer y en lo que he hecho para llegar aquí.
A veces, me dejo llevar por la presión del partido y de querer rendir, hacerlo bien, demostrar quién eres, qué puedes hacer y dar lo mejor de ti para tu equipo. Pero siempre intento volver al presente, porque uno puede perderse en los "qué hubiera pasado si...".
Hemos tenido muchos inicios de partido en la tarde noche. Creo que tenemos mucha experiencia en cómo gestionar eso en cuanto a la comida, especialmente para alguien como yo, que tiene dificultades para comer un día de partido por los nervios. Todo se trata de cómo sigues consumiendo energía, cuándo quieres descansar y cuándo tomar cafeína.
Por fin llegó...
Estoy súper emocionada. Me encanta estar en este equipo.
Todo lo que hago es para llegar a lo más alto posible en mi deporte, y lo más alto en rugby 15 es la Rugby World Cup. Y luego estar aquí con algunas de tus personas favoritas, con las que has conectado y con las que has pasado por todas las altas y bajas.
Son momentos como este los que nunca se recuperan y los que siempre recordarás.